Tuesday, December 4, 2007

Oh Canada

Un quinto de la población canadiense está formada por inmigrantes.

El 20%. Alrededor de 6 millones.

Hace años estuvimos Ares, los viejos míos, John Lent y yo en el Pacific Mall de Toronto. Rodeados de asiáticos, en su mayoría chinos. Miles y miles, que el mall es gigantesco. De haber sido de noche, hubiera pensado que nos habíamos colado en el set de filmación de
Blade Runner.

Por cierto, Blade Runner tiene varios méritos. Entre ellos el de haber logrado de Rutger Oelsen Hauer y Sean Young actuaciones no repetidas. Brujerías de Ridley Scott, supongo.

(Escena de la película, cuando Edward James Olmos lleva a Harrison Ford a verificar a Sean Young.)

Esa neo noir de culto y ciencia ficción tiene una de las escenas finales más escudriñadas del cine.

Roy Batty, el replicante que interpreta Hauer, tiene fecha de vencimiento. Con el conteo regresivo respirándole en la nuca sale a buscar a su creador para que le dé prórroga. No can do, dice el seudo dios.

Juego perdido y oyendo el pitazo final, Roy saca su lado humano en una azotea nocturna y llovida, y nos dice qué es lo que lo tortura, dónde está la mayor de las injusticias cometidas contra él: Sus recuerdos están a punto de perderse para siempre. Con su
termination, se van sus memorias, intermediarias emocionales.

"I've seen things you people wouldn't believe. Attack ships on fire off the shoulder of Orion. I've watched C-beams glitter in the dark near the Tannhauser Gate. All those... moments will be lost in time... like... tears..in..rain".

Y se muere, ante un aporreado y atónito Decker (Harrison Ford).


Una de lombrices, que los empresarios no somos tontos.




It's okay to laugh in the bedroom so long as you don't point.

-Will Durst

Pat Oliphant, la coña. Y del Lauzi. Y Ramirez.

It ain't over until the fat lady sings, dicen que dijo Yogi Berra.

Incierto.

Berra, todo un especialista en frases tipo "la técnica es la técnica..." nunca dijo tal.

Sí dijo: "It ain't over until it's over", pero aquí no procede. La frase de la señora gorda se refiere a esos actos finales de famosa ópera donde una dama de carapacho ancho, a veces vestida de walkiria entona su galillo cerrador de espectáculo.

Por lo tanto, se usa para marcar o pronosticar el final de algo. Anunciar a una obesa a punto de cantar es hablar de ya saben qué.

En el caso de la caricatura de abajo, creo que Ramirez quiere acabar con Chávez antes de tiempo, pero es tronco de dibujo como para dejarlo pasar.


Y dos de Lauzán.
Che Adidas.
LeChe




Y una de Oliphant.

Friday, November 30, 2007

Grand Old Party

Así están las cosas. Y creo que Oliphant fue benévolo.
blog it

Saturday, November 17, 2007

Historieta versión 2.0


Una Caperucita peculiar. No me importa lo que le pase a la abuela ni al lobo que se comió la merienda. Un poco cheesy la ilustración, pero tronco de texturas.

Esta caperuza huele a hardcore. Royo, Bisley, Frazetta y la lista larga de autores, pintan esas mujeres exóticas, sensuales, con cara de haberse quemado los dedos con el jarrito del café, pero con una técnica y un sexo por suceder sin discusión. ¿Dónde están esas mujeres? A nadie le importa. Los Ashley Wood y compañía nos evitan tener que buscarlas por ahí.

By the way, el autor de la Little Red Hood es Hoang Nguyen, vietnamita, león.


De las cosas que dan vueltas y vueltas en plan boceto, hay algunas que nunca salen a la tinta. Hay otras que tienen que ser haladas por las orejas.

Esta vez, el tirón viene por un email que me mandaron los del Universal Syndicate. Lo sospechado, los finales de la mitad de las tiras que les mandé son predecibles. Me dí cuenta también de que estaba metiendo de personaje principal al más flojito en el departamento de gags, que es Meodore, aprendiz de político. Pero eso lo vine a notar cuando estaba imprimiendo en Kinko's y me puse a ver las historietas por orden y en hard copy. Cuando lo vi me cayó como una patada, pero ya no tenía tiempo de nada. Plus, necesitaba el feedback de alguien de la industria.

Por eso cargué con mis libracos para Ohio. Mientras más leía, más me daba cuenta de que habían cosas mal, dispersas y tomadas por los pelos.

Esto pasa por dos razones fundamentales. Una es que nunca he podido dibujar con constancia, varios días seguidos, sin dedicarle tiempo a escribir. Cuando uno escribe es que empieza todo, y no siempre cuando a uno se le ocurre algo, solo toma forma cuando lo pone en el guión. Y así todo, hay que pasar por varias versiones y borradores.

La otra razón es que demasiadas veces he dibujado malas traducciones de historietas pensadas en español y eso es fatal, para no decir una barrabasada.

Pero el editor del Universal tuvo la delicadeza de darme el bate explicación mediante, cosa que hacen poquísimas y muy contadas veces. En el 95% de los casos (según ellos) se limitan a mandar una cartica modelo como las que manda el New Yorker.

Por eso voy a empezar de nuevo. De cero casi. A marcha forzada. Menos personajes, otro enfoque, más ángulos.

En eso me he metido estos días. Uno se piensa que hacer historietas es hacer caricaturas editoriales y no es así.


A veces le doy de largo a un garabato, y luego el muy hijueputa quiere zip code y todo. Ahora tendremos tanda de Ian y Frank. Ian ya ha salido con su mata parlante y Garbo, el de la basura.




Don't take shit from anybody.
-Billy Joel, al terminar sus conciertos.

Thursday, November 8, 2007

Viernes más, viernes menos. Again.

Las pirámides serían putísimas, pero la Helvética era una tipografía de lo más popular también. Tan es así que Microsoft no se pudo aguantar y la cacharreó, dejándonos la Arial. Aquí hay un test para diseñadores de bolsillo, a ver si se dan cuenta cuándo es Arial y cuándo es Helvética.

Esta es Verdana, by the way.


En el New Yorker no pasan trabajo para darte el bate.





Leo que en Granma, la provincia, las inundaciones son de lo peor en los últimos 40 años. No quisiera estar en los zapatos mojados de cientos de familias que lo han perdido todo allá. De pinga.



Simon Bisley, a lo Frank Frazetta... ooops...
The Russians love Brooke Shields because her eyebrows remind them of Leonid Brezhnev.
-Robin Williams.

Wednesday, November 7, 2007

Breakfast in Tiffany's

Hice como 25 de estas historietas. El reto era poner todo a girar alrededor de la mesa, en plan teatro, con la mujer y su troglodita en el desayuno.

Ah, y con un pincel defectuoso.

Por suerte no me las publicaron casi.





It was so cold I almost got married.
-Shelley Winters

Tuesday, November 6, 2007

Todos los momentos










A male gynecologist is like an auto mechanic who has never owned a car.
-Carrie Snow.

Sunday, November 4, 2007

Miami abierto

Iba delante de mí camino al Palmetto, y vi el sticker en la parte de atrás del puto SUV plateado. En cuanto miré el degradado verde aguacate a morado no me pude aguantar . Tuve que acelerar y acercarme.


Antes de seguir quiero decir que debería existir una ley internacional e inviolable que diga que toda aquella persona que diseñe algo, está solamente autorizada a utilizar un número limitado de degradaciones de colores en su diseño. Digamos tres al mes. No más. Y si la degradación es de colores fríos a cálidos (o viceversa), una al año. No más. El que se pase, tratamiento de canal con mi dentista, pa que sepa lo que es bueno.


Pero decía que vide la pegatina en la parte de atrás del SUV plateado, y me le acerqué para poder leer. Decía:

"No te pegues. Pégate a Jesús."


Le ronca. Primero pone las letras chiquiticas en el pedazo de calcomanía chea esa, para que nadie las lea a distancia. Luego me regaña porque me acerco y después me dice que le dé repello al pobre Chucho en su cruz.

Me dieron ganas de decirle idiota y aberrada. Pero no me dio tiempo, porque la señora que manejaba el SUV metió una cañona para cambiarse de senda y encaramó por donde no era para montarse en la I-95.

Imbécil.


El Fede me ha mandado la foto de abajo. Esos dos sí saben lo que es vivir.


(Gracias al Fede por mandar la foto, y al desconocido fotógrafo mpor tomarla.)



Nos perdimos lo de Habana Abierta, porque mis habilidades de instalador de lámpara de techo dejan mucho que desear, con viaje a Home Depot y todo. Que alguien me cuente cómo fue. Lo de Habana Abierta, no lo de la lámpara.





Jews always know two things: suffering and where to find great Chinese food.
-Del filme My favorite Year, 1982.

Friday, November 2, 2007

De parte mía

Al fin Sarmiento tiene su sitio web, y la verdad es que me ha cuadrado mucho. Ya lo verán, supongo. Hay un contraste entre el diseño sobrio y la estridencia de los dibujos. Hace unos años, rabia y estilo tales lo hubieran etiqueteado de underground, a vivir vete a saber de qué.

Pero, Robert Crumb mediante, el paisaje es otro. Por suerte, ¿no?

A Eduardo Sarmiento lo conocí cuando era de la tropa de El Camaleón, sin graduarse del ISDI todavía. El Camaleón era ( y debería ser todavía) un grupo de diseñadores e ilustradores que sonaron lo suyo hace unos años y tuve el placer de exponer con ellos una vez.

Pero hablaba de Sarmiento. Su estilo me recuerda al Lauzán recién desencadenado de los dibujos de academia y sin miedo a los colores, ni a blandir la escatología de vez en cuando para hacerse oír. Igual de irreverente, y eso, conmigo, tiene carta de crédito a cualquier hora.

¡Métele, Rufino!



Nos dice la NASA, que si el lunes tempranito en la mañana ven un cielo que parece sacado de un screenshot de Halo 3, es porque cosas raras y bonitas van a pasar.

Eso espero.



Monday, October 29, 2007

Milton Caniff, marketing caribeño y vacíos domingueros.

Estuve en Columbus, Ohio, como el que sí quiere las cosas. Resulta que la Universidad Estatal de allí organiza cada tres años un festival del comic y la caricatura. El evento es un vacilón, y yo tripeaba con la abundantísima colección de Milton Caniff en el campus de la universidad, con algunas conferencias y desayunándome de una pila de cosas.


Me sirvió la visita para conocer a algunos ejecutivos de agencias de distribución de historietas, con la consabida entrega de resumé gráfico. Y para gastarme más de lo que debía en libros, pero ya saben... la carne es débil.




Este es Paul Fell, un caricaturista de Nebraska, fan de football y un tipo encojonadamente amable y servicial. El que pida más, es que es del CDR.

Paul no solo me puso en talla del evento, sino que me presentó a medio mundo. Propuesto está para el Nobel, en lo que a mí respecta.



El primero es Brendan Burford, de King Features, Mort Walker, creador de Beetle Bailey, Mike Peters et moi.

Mort llegó a abrir el Museo del Comic en Boca, para el que Schulz donó un millón de dólares y montones de originales. Todo para que el museo muriera a manos de los burócratas y los developers. Y Peters es un personaje, una tira cómica él mismo.

El caso es que el evento fue una experiencia más que placentera en lo personal para la Lis y para mí. Como historietista me dejó un cierto regusto a gorrión por todo lo que vi allí y por lo que me he perdido todos estos años, para no hablar de lo que no ha tenido y lo que se le ha negado a la historieta en Cuba.

No me voy a poner a elaborar aquí los argumentos, porque voy a sonar amargado. Pero no me va a quedar más remedio que tocar el tema mañana u otro día. De lo que faltó, repito, de lo que le quitaron y le otorgaron (también) injustamente a la historieta cubana. De comentarios de Zumbado y de un artículo a medio escribir sobre el tema cuando me dio por entrevistar a escritores y editores.

No sabemos nada de nada.

Otra cosa, si usted va a Columbus un domingo, vaya a ver el downtown más vacío que se haya visto jamais. De película. Me imagino que siempre es así cuando no sesiona el Satehouse, el legislativo del estado.





If you tell the truth you don't have to remember anything.
- Mark Twain (1835-1910)

Tuesday, October 23, 2007

Suena Caracas


Leo que muchos estudiantes en Caracas andan arrechos y protestando. Y en Penúltimos días de paso lamentan que los cubanos han sido muy dóciles últimamente, mientras que algunos comentadores se defienden, supongo que como ex alumnos.

Lo de la criticada falta valor de los estudiantes ( y de toda la población, dejémonos de bobadas) es algo incómodo de tratar. Uno no sabe si echar mano a otros argumentos como el de la ignorancia, la desinformanción generalizada (que son formas de conformismo a veces) para evitar el buche amargo del cartel de "cordero".

Hasta se podría sacar el tema de que es muy lindo burlarse y cuestionar a los cubanos del cayo cuando se está afuera y a buen resguardo. Pero eso solo sirve para que los que se sientan aludidos nos agiten en las narices su curriculum de disidente, y supongo que con todo derecho, el que lo tenga.

Pero igual de incómodo es enfrentar el enigma del corderismo, la logia del "bend, but don't break", la hipocrecía altiva y el darle jabón a todo, para poder escaparse o sobrevivir.

La culpa de todo la tenemos todos, creo yo.

So fuck off, criticoides.

Y me alegro por los protestones estudiantes de Caracas, no me importa cuán románticos o manipulados sean, que al fin y al cabo, las dos cosas se tocan a veces. Pero coño, ta bueno ya de puyitas, porque al final, todos los cubanos (los listos, los comemierdas, los locos, los brutos, los iluminados, los honestos y los camajanes) somos los que nos vamos a tener que comer con papa de una manera u otra lo que pase en el cayo. No importa si vivimos en Ranchuelo o en Arizona. En algún momento tenemos que tomarnos en serio.

Tirar curvas no garantiza una nación decente. Pero echarnos con el rayo a destajo... creo que menos.

En fin, el mar.


Esta ilustración, y la que abre el blog es del norteamericano residente en Londres Phil Hale. Sus temas y sus texturas me recuerdan a un Brom algo descafeinado y más agresivo componiendo. El tal Hale lleva veneno, el muy hijueputa.


Y para cerrar, una senza parole.

Monday, October 22, 2007

La universidad es de los revolucionarios.


"... Imponer al alumno Fernando Rodríguez Rodríguez la medida disciplinaria de expulsión de la Educación Superior, según lo establecido en la Resolución No. 200.84, artículo 37 inciso a)..."

Así empieza el segundo folio del acta redactada en el ISDI el 1ro. de junio de 1993, en al Año 35 de la Revolución.

No se murió nadie, nadie se desmayó, ni se cayó el techo ni se lloró ni nada. Todo normal. Otra campaña esterilizadora, otra derrota para las fuerzas del mal dizque socavan los recintos de estudios superiores en el cayo.

Y ahora, yo pregunto: ¿Para qué? ¿Para qué ha servido todo eso, aparte de para joderle la carrera a mi hermano y a otro amigo? ¿De qué va a servir la Batalla de Ideas? ¿Para alargar la agonía?

En el ISDI, y en Educación Superior en general, se han graduado profesionales de prestigio y talento. Pero también su mequetrefe mediocre que ha sabido mantener su perfil bajo y cumplir con la FEU, la UJC, los CDR, et al.

Contrario a lo que piensan muchos rígidos de
cerebro -en Miami y en otras partes- para estudiar en la Universidad en Cuba no hay que ser militante de la UJC. Es más, hay algunas especialidades donde el aval político es secundario.

Pero no te me pases la carrera burlándote de los discursos del comandante, ni tirándole curvas a las reuniones de la FEU, ni burlándote de los dirigentes socotrocos porque eso sí que no va, mi socio.

Tal y como le dijo una profesora a mi hermano en aquel día de sanciones, era preferible graduar diseñadores mediocres que diseñadores contrarrevolucionarios.

Yo sé que historias como esa han pasado en el cayo, y peores también. Pero, coño, yo sigo preguntándome: ¿De qué va a servir tanta politiquería? ¿Tanto cuidar una ideología que no ha hecho otra cosa que dar bandazos y cobrar víctimas como otra cualquiera? ¿Con qué cara se va a criticar al que haya dicho: "Si no estás conmigo estás contra mí"?

Cuando pasen los años, ¿de qué va a servir la vigiladera, el miedo, la delación, la confusión, el silencio por conveniencia? Lo digo porque yo me callé mucho y me hice el comemierda muchas veces, y no me hace ninguna gracia. Pero yo he tenido suerte. Otros no.

En "Video de Familia" de Humberto Padrón, la escena final muestra a los protagonistas abrazándose en plena catarsis, y de fondo, Carlos Varela machacando que no sirvió de nada, dee naada...

A ver si toman nota los pobres diablos que quieren cuidar no sé bien qué.



(El fede me mandó la foto. Tampoco él sabe el autor)





En Liboriolandia, un par de reflexiones sobre nuestro himno nacional. Ese que en los actos todo el mundo canta bajito y con pena.